Las 8 mejores plantas pequeñas para decorar la cocina
Estamos de acuerdo en que, las plantas, son capaces de alegrar cualquier rincón. En el interior de nuestros hogares, son ideales para sumar un extra de calidez, valor ornamental y purificación del ambiente, dada su capacidad para limpiar el aire e, incluso, filtrar los gases de la contaminación atmosférica.
La cocina es una de las estancias del hogar más concurridas y, también, de las más agradecidas a la hora de añadir un toque “verde” a nuestras baldas, carritos auxiliares o macetas de techo. Las plantas nos ayudarán a crear una cocina de lo más encantadora y hogareña. Y, lo mejor de todo, es que podemos conseguirlo mediante plantas de pequeñas dimensiones, que no nos resten espacio para el resto de tareas.
Si tú también quieres incluir un poco más de vida a tu cocina, no te pierdas este artículo.
8 Filodendro de hoja de corazón
Comenzamos con una de las plantas más comunes en los hogares debido a su facilidad de cultivo. Se trata de una planta muy adecuada si te estás iniciando en el mundo del cultivo de plantas de interior. Puede adaptarse a zonas donde, la luz natural, no sea muy abundante. Además, no requiere de un riego riguroso – bastará con que la tierra se mantenga húmeda – y gusta de un suelo de buen drenaje.
Puedes encontrar, a grandes rasgos, dos tipos de Filodendros: trepadores, los más comunes y adecuados para interior, y no trapeadores, que tienden a crecer quizá en exceso para situarlos en la cocina.
Apuesta por un Filodendro de hoja de corazón trepador y colócalo sobre una balda superior o una maceta colgante. ¡Quedará precioso!.
7 Hierbabuena
¿Qué mejor que incluir una hierba aromática en tu cocina? La hierbabuena, además de impregnar tu cocina con su olor cítrico, aderezará tus platos con sabores frescos.
Su cultivo es de lo más sencillo: crece muy bien a temperaturas de entre 14º y 20º, requiere de un riego moderado, pues el sustrato ha de permanecer siempre húmedo, y, en cuanto a la luz, crece sin problemas en espacios de semisombra.
Utiliza tarros de cristal que ya no uses y dales una segunda vida como maceta. Puedes colgar estos tarros en la pared, mediante pequeños ganchitos, para tener siempre a mano tu planta de hierbabuena.
6 Planta rosario
También conocida como “planta de bolitas colgantes”, es un tipo muy ornamental que lucirá en todo su esplendor colocándolo en altura. La planta rosario se caracteriza por sus peculiares hojas de forma esférica, a modo de perlas de color verde, que les hace parecer uvas.
Su cuidado en condiciones óptimas, le permite florecer unas preciosas flores blancas. Este tipo requiere de grandes dosis de luz para desarrollarse adecuadamente, a unas temperaturas de entre 16º y 25º y regándola solo cuando es necesario, pues no tolera el exceso de humedad.
Como peculiaridad, recuerda que la Planta Rosario es tóxica si se ingiere. Su toxicidad es una razón más para ubicarla en lugares donde el acceso sea difícil – por no decir imposible – en caso de tener mascotas o hijos.
5 Helecho
El helecho es una de las plantas más bonitas y decorativas que podemos encontrar en los hogares. Además, es considerada la planta más antigua sobre la tierra. Si a ello le sumamos su acción purificadora del aire, tenemos un auténtico tesoro natural.
Por todo su valor, compensa el hecho de tener que regarlo con frecuencia. El helecho, para crecer en óptimas condiciones, requieren de un riego a menudo para crecer más bonitos. Bastará con colocarlo cerca de un humificador o bien situar la maceta sobre un plato con guijarros o piedras con agua, las cuales le irán suministrando la humedad necesaria. También puedes hacerte con un pulverizador de agua para darles un toque extra de humedad.
Evita situar el helecho en una zona próxima a una corriente de aire, pues son sus peores enemigos.
4 Sansevieria
Si hay una planta que está adquiriendo, cada vez, más presencia en los hogares es la Sansevieria. Y no es para menos. Cada uno de los tipos de Sansevieria, entre toda la variedad que existe, es extraordinariamente bonito y ornamental, por lo que hay para todos los gustos.
Se trata de una planta que se adapta muy bien a cualquier condición. De hecho, puede cultivarse tanto en el interior como en el exterior. Junto a la Sansevieria, hay todo un mundo de plantas de lo más resistentes a diversas condiciones climáticas. Si os interesa saber más sobre plantas resistentes tanto al frío como al calor, no os perdáis el artículo de Jardinizados.
La Sansevieria, además de una planta muy resistente, es famosa por su longevidad. Sus hojas planas y robustas son sus elementos más reconocibles, las cuales tienden a crecen en forma de roseta. De color verde oscuro, presentan vetas y líneas amarillas que la dotan de una gran belleza.
La Sansevieria quedará de maravilla colocada en las baldas de tu cocina. Puedes hacerte con varios tipos de esta planta, dotarlos de un macetero bonito y colocarlos juntos.
3 Perejil
Todavía más frecuente en nuestra cocina que la hierbabuena es, sin duda, el perejil. Además de formar parte de muchos de nuestros platos de la gastronomía, es una planta muy ornamental que, además, presenta unos requisitos de cultivo mínimos.
Debemos de proporcionarle una humedad constante, pero sin excedernos. En cuanto a la luz, necesita un lugar soleado, pero sin recibir la incidencia del Sol directamente. Para ayudarle a crecer más fuerte y sano, aunque no vayamos a consumirlo, es recomendable podarlo de vez en cuando.
2 Cintas
El Chlorophytum, popularmente conocido como cintas, debe su nombre a la forma de sus hojas, largas y delgadas que pueden llegar a medir entre 20 y 30 centímetros de largo. Es una planta muy decorativa de la que además brotan unas pequeñas flores de color blanco.
Su origen lo encontramos en el Sur de África, cuyas condiciones climáticas la han convertido en una de las plantas más resistentes de interior. Por ello, es una planta muy fácil de cuidar puesto que se adapta muy bien a cualquier espacio y condición.
La cinta puede tolerar la luz, pero no la incidencia directa del sol, puesto que sus hojas podrían quemarse. Es por tanto una planta perfecta para los lugares de semisombra o, incluso, de sombra.
1 Poto
El poto es la planta por excelencia de los hogares. Lo encontramos en innumerables espacios de interior, dado que es una de las plantas más resistentes y, a la vez, bonitas.
Es ideal para principiantes debido a sus mínimos cuidados. Soporta la escasez de luz y solo será necesario regarlo cuando su tierra esté seca. Además, colocada en interior, nos ayudará a purificar el aire de nuestra estancia, en este caso, de la cocina.
Sus ramas colgantes la convierten en una planta ideal para coronar estanterías o lucir en macetas colgantes. De hecho, se recomienda, al igual que la Planta del Rosario, colocarla en lugares poco accesibles, dado que es una planta tóxica y completamente prohibida para perros y gatos.